Es momento de actuar

Si te identificas con algunos de los siguientes puntos, es momento de tomar acción..

• Tus rodillas te duelen y ya no te dejan moverte a tu máximo potencial.
• Empiezas a tener dificultades para levantarte de la cama o de la silla.
• Tu rodilla produce un chasquido o se bloquea al estirar o flexionar.
• Notas alguna forma o color fuera de lo normal en tus articulaciones.
• Ya no disfrutas de practicar tu deporte o disciplina favorita.
• Llevas una vida sedentaria, tienes sobrepeso o has perdido fuerza muscular.